Cuarenta y seis republicanos de la Cámara de Representantes (Congreso) se unieron a los demócratas esta semana para proteger el lenguaje en la legislación de la política de defensa que llama al cambio climático una “amenaza directa” a la seguridad nacional y requiere un nuevo análisis del Departamento de Defensa de su efecto sobre los militares.
La Cámara de Representantes votó 185-234 contra la enmienda de Scott Perry a la Ley de Autorización de Defensa Nacional, que habría desnudado el texto del proyecto de ley que requiere el estudio.
Este representa un hito para la política legislativa en Estados Unidos. El bipartidismo sobre el clima ha sido escaso durante años, y la votación del jueves proporciona un impulso a los defensores con la esperanza de que las opiniones republicanas sobre la importancia del calentamiento global están cambiando.
Todavía hay un abismo entre los dos partidos sobre el cambio climático y escasa evidencia de que los legisladores del Partido Republicano o la Casa Blanca dirigida por Trump estén abiertos a políticas de reducción de emisiones que apoyan muchos demócratas, como la regulación directa de las emisiones industriales de gases de efecto invernadero o los impuestos sobre el carbono.
En republicano Perry dijo durante el debate, que él ofreció la enmienda porque el clima no debe ser la prioridad para los comandantes militares que se ocupan de temas como el extremismo islámico y Corea del Norte y que los legisladores no deben dictar en qué asuntos se centran.
“Literalmente, las letanías de otras agencias federales se ocupan de asuntos ambientales incluyendo el cambio climático”, dijo Perry, un veterano del Ejército.
Pero la representante republicana Ileana Ros-Lehtinen argumentó en contra de la enmienda, señalando la amenaza del aumento del nivel del mar en las instalaciones militares. Dijo que los responsables políticos deben ser “claros” sobre el tema. La representante del Partido Republicano, Elise Stefanik, dijo al oponerse a la enmienda de Perry de que “seríamos negligentes en nuestros esfuerzos por proteger nuestra seguridad nacional” al no contabilizar el efecto del cambio climático en los militares.
Un número de expertos y altos funcionarios militares ya han advertido que el cambio climático plantea varios riesgos y desafíos al Departamento de Defensa, incluyendo el papel que el calentamiento global puede jugar en exacerbar el conflicto en regiones inestables.
Este texto apareció originalmente en Axios, puedes encontrar el original en inglés aquí.
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