La vida ecológica es un gran tema de conversación en estos días, y una de las formas más fáciles de participar es comer menos carne. Reducir el consumo de carne significa menos emisiones de dióxido de carbono, metano y óxido nitroso; también puede ahorrar agua durante estos tiempos de sequía, ya que casi la mitad del agua utilizada en Estados Unidos se destina a la agricultura animal.
¿No estás de humor para “carne falsa”? No temas, tenemos muchas otras ideas de comidas para ti que van más allá de la hamburguesa de carne falsa. Aquí hay 13 recetas vegetarianas que se inspiran en todo el mundo y celebran las verduras por todas sus mejores cualidades (con un poco de queso y huevos espolvoreados aquí y allá).
Esta versión de las tradicionales tortas de maíz colombianas a menudo rellenas con varios rellenos es gloriosamente pesada en queso. Solo ten cuidado: el ingrediente secreto en la salsa hogao que acompaña con tomates, ajo y cebolletas no es vegetariano, pero puedes reemplazarlo con una alternativa vegetariana.
Pelau es un pilaf elaborado con leche de coco que proviene de Trinidad. Por lo general, está hecho con pollo, pero sabe igual de bueno sin carne cuando se llena con la bondad de los guisantes de ojos negros y la calabaza.
Esta comida en una olla cuenta con todos los sabores de un curry rojo tailandés tradicional, pero solo toma un poco más de una hora, gracias al uso de pasta de curry preparada.
Antes de que Estados Unidos tuviera jalapeños poppers, en Puebla tenían chiles rellenos: chiles poblanos asados rellenos con queso derretido, cubiertos con una masa de huevo y fritos hasta que estén crujientes. (Y si no consumes huevos ni lácteos, prueba un taco de verduras para rendir homenaje).
Japchae, fideos translúcidos de camote salteados con espinacas, zanahorias, cebolla y ajo en una salsa dulce de soja y sésamo, es comida casera coreana.
India ofrece muchas delicias vegetarianas (aloo gobi es una forma favorita de preparar papas), pero este plato de garbanzos picantes y condimentados se basa en alimentos básicos de la despensa, lo que le da una ventaja en este momento. Es una comida deliciosa con yogur y arroz, y es fácil y accesible incluso para aquellos que son completamente nuevos en la cocina del sur de Asia.
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Este plato tiene orígenes del norte de África, pero se ha asociado inextricablemente con Israel. Existe una versión que casa los tomates con cebollas fundidas y chiles verdes frescos; y se sirve con queso feta y zhug, una salsa picante yemení de hierbas (o prueba una variante verde de Shakshuka). Si no tienes huevos o no los comes, intenta cocinar cucharadas grandes de tofu sedoso en la salsa para evocar esa textura encantadora de huevo escalfado.
Las claves de este estofado persa increíblemente simple pero encantador son una gran cantidad de eneldo y cebollas bien cocidas, además del tipo correcto de frijoles secos.
Estas albóndigas chinas al vapor ligeramente masticables están hechas con un relleno de espinacas, zanahoria, champiñones y tofu prensado que se saltea primero antes de ensamblar.
Si tienes una caja de pasta y queso pecorino en casa, estás a solo unos minutos de comer una fuente de pasta cacio e pepe, un plato que encarna la simplicidad italiana en su máxima expresión.
Estas albóndigas polacas carnosas pero sin carne son difíciles de no amar, con su relleno de champiñones cremini, cebolla y ajo envueltos en una tierna masa de crema agria. Después de hervir, puedes dorarlos en una sartén con mantequilla para obtener un contraste nítido.
Este no es un plato japonés estrictamente tradicional, pero utiliza ingredientes japoneses favoritos como fideos soba y pasta de miso roja rica en umami, además de una guarnición de nori asado. Este es un plato fácil pero inusualmente delicioso al que volverás a menudo.
En lugar de guisar todas estas icónicas verduras de verano juntas, puedes cocinarlas por separado para que cada una conserve una textura perfecta. Gira esta mezcla vibrante de verduras con pasta como plato principal, o úsala para cubrir tostadas como bocadillo o aperitivo. O simplemente cómelo con una cuchara.
Un plato de verduras a la parrilla, esencialmente una ensalada griega deconstruida con queso halloumi firme en lugar de queso feta. Y sí, hasta la lechuga se asa a la parrilla. Sirve con pan plano para que sea una comida completa.
Este texto apareció originalmente en Greatist, puedes ver el original en inglés aquí.
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