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Para Gertrude Berg, cada diseño es un reto a la creatividad ya que sin hacer ningún corte extra al que ya trae la tela al momento que llega a sus manos, transforma un retazo en una pieza que se puede vestir y se adapta a la forma del cuerpo. Los diseños, completamente atemporales, adquieren un significado distinto al de la moda en general y mucho más profundo.
Berg estudió escultura en la escuela del Museum of Fine Arts de Boston, no es de extrañar que sus diseños tengan ese mismo trato y sentido escultural que adquirió durante su educación. Con el tiempo, Berg se ha aliado a ciertos fabricantes de ropa que le donan los retazos de tela, es decir, la materia prima de su trabajo.
A través de su marca “BergWerk“, la artista-diseñadora pone su trabajo al alcance del mundo con una tienda en línea. Lo que más disfruta es el no tener el control absoluto de las prendas, sino depender en cada ocasión del material que tiene disponible, además de darse el lujo de romper cualquier regla tradicional de la moda.
El trabajo de Berg aparte de ser creativo está dotado de cierta conciencia social, sus diseños ayudan a reducir el desperdicio de la industria de la moda que, en nuestros tiempos no es poco, y ofrecen una alternativa sustentable para vestirte. Esta diseñadora demuestra que todo es reutilizable y que además, el desecho puede verse bien.
Este texto apareció originalmente en VeoVerde, puedes leer el original aquí.
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