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El 19 de noviembre de 2008, el estadio bimundialista Francisco Sánchez Rumoroso fue reinaugurado. Con una gran inversión se transformaba en un recinto con estándares FIFA y se convertía en una de las sedes del Mundial Femenino de Futbol Sub-20.
Sin embargo, el estadio que se convirtió en un símbolo de orgullo para la comuna de Coquimbo, también genera altos gastos, especialmente en lo que se refiere al consumo de energía eléctrica.
Así por ejemplo, el gasto mensual es de 6.5 kw/hora en periodo de bajo consumo y 68 kw/hora en medio, alcanzando a 398.34 kw/hora en periodos de alto consumo. Esto se traduce en que al año se pueden gastar más de $70 millones sólo por consumo eléctrico del estadio y que, según datos de la Secretaría de Planificación (Secplan) del Municipio de Coquimbo, en los últimos cuatro años ya se han gastado $203 millones.
Para reducir estos costos, es que Secplan está trabajando en un proyecto para convertir al recinto deportivo en el primer Estadio Sustentable de Chile. Esto a través de un proyecto que fue conocido en Holanda por las autoridades y que transforma los residuos orgánicos en biogás y energía.
El alcalde Marcelo Pereira explica que no se necesita una gran infraestructura para instalar el proyecto y tampoco última tecnología. Señala que todos los residuos orgánicos, mediante la descomposición en ambientes sin oxígeno producen un gas que genera energías y
“es importante hacerlo porque el estadio no genera ingresos, más bien genera gastos. Con esto vamos a comenzar a bajar lo que estamos gastando, de una forma autosustentable”.
El proyecto visitado en Holanda entrega 100kw/hora de alimentación a través de materia orgánica y 321 m3 de biogás. Además considera baterías de almacenamiento de energía. Por otra parte necesita solo un espacio para instalación cuya superficie no supera los 16×9 metros. Sin embargo requiere 3 mil kilos de desechos orgánicos al día para funcionar.
Para ello, es vital la asociación con las ferias libres instaladas en Coquimbo, ya que por ejemplo solo la feria que se instala frente al puerto el día miércoles elimina sobre 7 mil kilos de desechos y el domingo más de 5 mil kilos. Por otra parte se instalarán puntos de reciclaje para este tipo de residuos en el mismo estadio Francisco Sánchez Rumoroso, para que este la comunidad se sume a este proyecto. El edil señala que este proyecto será el primer hito para convertir a Coquimbo en una smartcity y que los habitantes de la ciudad puedan educarse en el reciclaje y el uso eficiente de los residuos.
“No solamente con las ferias libres, sino que habría puntos verdes cercanos al estadio y también asociarnos con nuestras famosas picadas de Peñuelas e ir a buscar la materia orgánica y ser el alimento para esta infraestructura que permitirá que el estadio se mantenga iluminado gracias a esta nueva forma de energía renovable y lo más importante es que la municipalidad va a ahorrar dineros que podemos destinar a obras sociales y subvenciones”, agrega el alcalde.
El equipamiento para este proyecto alcanza una inversión de 300 millones de pesos y Secplan se encuentra en etapa de análisis y elaboración de las bases para el estudio de factibilidad técnica que tendrá un costo de 40 millones. Si la iniciativa avanza, el edil espera que ya a fines del año 2018, el estadio de Coquimbo se convierta en el primer recinto que utilice energía limpia.
Este texto apareció originalmente en Diario El Día, puedes encontrar el texto original aquí.
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