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Si la alcaldesa de París (Francia) es persistente, los automóviles de gasolina habrán desaparecido de su ciudad para 2030. Los ciudadanos se moverán en transporte público, bicicletas y automóviles eléctricos. Así, París estará en camino hacia la neutralidad del carbono para 2050.
El anuncio que hizo la alcaldesa Anne Hidalgo para eliminar los autos de gasolina para 2030, sigue un plan previamente anunciado para eliminar los automóviles diésel de la ciudad para el 2024, cuando París sea la sede de los Juegos Olímpicos de verano.
“Estamos viendo una revolución en términos de movilidad y en el tema del clima”, dijo Christophe Nadjovski, teniente de la alcaldesa de París a cargo del transporte y el espacio público, a France Info Radio. “No podemos esperar”.
La oficina de la alcaldesa emitió una declaración que aclaraba sus objetivos después de que los medios informaran que la ciudad estaba prohibiendo los automóviles de gasolina.
“No se incluye ninguna medida de prohibición o sanción” en el nuevo plan climático para París, dijo la oficina de la alcaldesa en el comunicado. “Para alcanzar el objetivo de ponerle fin a los motores térmicos en 2030, la ciudad ha decidido invertir en el desarrollo de alternativas y en el refuerzo de ayudas financieras que permitan a los individuos y profesionales comprar vehículos limpios”.
El plan climático se presentará al Consejo de París para su votación en noviembre.
En la declaración se hizo hincapié en que se les facilitaría la transición a los ciudadanos, apuntando a los anuncios recientes de los fabricantes de automóviles para detener gradualmente la producción de automóviles de gas y diésel.
También se promocionaron las inversiones en transporte público y carriles para bicicletas. Las autoridades dicen que más del 60% de los parisinos no posee un automóvil.
En julio, el ministro de Medio Ambiente de Francia, Nicolas Hulot, anunció que el país planeaba prohibir la venta de automóviles con gasolina o diésel para 2040. Dijo que el país pretende ser neutral en términos de emisiones de carbono para 2050, una decisión vinculada a la del presidente Donald Trump de retirarse del Acuerdo Climático de París.
Después de un fenómeno atmosférico conocido como inversión, que sucedió en marzo, “los niveles de contaminación en París superaron momentáneamente a los de Beijing (China)”, informó Eleanor Beardsley de NPR. Como resultado, la ciudad alternó temporalmente entre la prohibición de automóviles con placas matriciales pares e impares. En julio, Hidalgo prohibió que los automóviles fabricados antes de 1997 condujeran en la ciudad durante el día, de lunes a viernes. Unos meses después, París convirtió los muelles inferiores a lo largo del río Sena en veredas para peatones y ciclistas.
Aunque los defensores de propietarios de automóviles han criticado sus iniciativas por ser hostiles hacia la clase trabajadora, la alcaldesa tiene la intención de impulsar a los residentes de su ciudad a acostumbrarse a ser menos dependiente de los vehículos de gasolina.
El 1 de octubre, la ciudad celebró “un día sin autos”, con la intención de hacer de París “menos contaminado, más agradable y más pacífico”. Los niveles de dióxido de nitrógeno cayeron un 25%, y los niveles de ruido disminuyeron, en promedio, un 20%. En los Campos Elíseos, los niveles de ruido cayeron un 54%.
“Sensibilizar a los residentes sobre la necesidad de modificar su comportamiento hacia el automóvil fue parte de los objetivos de este día”, dijo la alcaldía en un comunicado, y agregó que también debía ser un símbolo “de que las ciudades pueden y deben idear soluciones concretas para luchar contra la contaminación del aire causada por el tráfico automovilístico”.
Este texto apareció originalmente en NPR, puedes encontrar el original en inglés aquí.
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