La próxima vez que desees viajar desde la estación de trenes Termini de Roma para visitar el Vaticano, es posible que desees recoger algunas botellas de plástico en el camino.
Si bien el plogging siempre es genial, las botellas de plástico recolectadas tienen un propósito diferente. Roma está probando un esquema donde la gente puede cambiar botellas de plástico por viajes en metro.
La capital italiana ha lanzado una prueba de 12 meses del programa llamado “Ricicli + Viaggi” o Recicla + Viaja, en tres estaciones de metro. El programa permite a los viajeros depositar botellas de plástico a cambio de cinco centavos de euro cada una, de acuerdo con The Local, que se puede usar para pagar el viaje en metro.
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Esos centavos se pueden acumular en la aplicación de metro hasta que alcancen el precio de un boleto de metro, que actualmente es de €1.50, es decir, que un viaje cuesta 30 botellas, lo que significa 30 botellas de plástico menos que ensucian eternamente las calles de la Ciudad Eterna.
Roma, plastica da riciclare in cambio di biglietti per il trasporto pubblico. #Verdi: “Soluzione interessante, l’abbiamo proposta all’Eav. Potrà essere un incentivo alla differenziata e ridurrà i passeggeri senza biglietto” pic.twitter.com/wTIUmdn4Zr
— Francesco Borrelli (@NotizieFrance) July 24, 2019
Después de que termine la prueba de un año, Roma revisará los resultados para ver si el esquema debe ampliarse más allá de sus tres estaciones iniciales.
Si bien este programa de reciclaje es inteligente, como señaló el ministro de Medio Ambiente Sergio Costa en una publicación de Facebook.
“lo ideal sería consumir menos plástico de un solo uso y optar por botellas reutilizables, pero si compras una botella de agua de plástico o encuentras una ensuciando la calle, puedes cambiarlo por un viaje en metro”, añade Costa.
La alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, quien en marzo prometió una prohibición de los plásticos de un solo uso, dijo que el proyecto es el primero de su tipo en una “gran capital europea”, aunque existe un sistema similar en el sistema de metro de Estambul, así que quizás esa era una sombra sutil de “gran capital europea”.
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Estambul ha tenido “máquinas expendedoras de reversa” en sus estaciones de metro desde finales de 2018. Su versión permite a los pasajeros agregar crédito a sus tarjetas de metro reciclando una botella de plástico o una lata de aluminio en la máquina. Y Surabaya, Indonesia, permite a los pasajeros cambiar solo cinco botellas de plástico por boletos de autobús.
Si tiene la suerte de ir pronto a Roma, tráigame y podremos probar las máquinas que se encuentran actualmente en la estación Cipro en la línea A, Piramide en la línea B y San Giovanni en la línea C.
Este texto apareció originalmente en Fast Company, puedes ver el original en inglés aquí.
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