La industria del carbón de Estados Unidos ya ha sido dejada en el polvo por el gas natural. Ahora está bajo una inmensa presión del auge de las energías renovables.
El sector de energía renovable tenía un poco más de capacidad instalada que el carbón en abril, según un informe de la Comisión Federal de Regulación de Energía. Eso significa que las plantas eléctricas de EE.UU. Pueden producir más energía a partir de fuentes limpias que el carbón por primera vez en la historia, según la Campaña SUN DAY, un grupo de investigación sin fines de lucro que apoya la energía sostenible. El avance refleja el desplome del costo de la energía solar y eólica, así como la mayor preocupación ambiental por el carbón.
“El carbón no tiene una trayectoria tecnológica”, dijo Jeff McDermott, socio gerente deGreentech Capital Advisors, un banco de inversión especializado en energía limpia. “No tiene a dónde ir sino a la extinción”.
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La revolución de la energía limpia está al borde de un punto de inflexión. También en abril, se proyectó que el sector de energía renovable generaría más electricidad que carbón, según un informe separado publicado por el Instituto de Economía Energética y Análisis Financiero, esa transición fue parcialmente impulsada por problemas estacionales.
Al mismo tiempo, Estados Unidos ha reducido drásticamente su apetito por el carbón. Desde un pico en 2008, el consumo de carbón de Estados Unidos se ha desplomado un 39% al nivel más bajo en 40 años, según la Administración de Información de Energía de los Estados Unidos.
Los hitos se producen a pesar de la promesa del presidente Donald Trump de impulsar la industria del carbón mediante el recorte de las normas ambientales. Los analistas dicen que eso se debe a que el cambio hacia las energías renovables está impulsado más por la economía que por la regulación.
“El gobierno puede aprovechar los frenos o acelerar este movimiento, pero este progreso continuará avanzando”, dijo Matthew Hoza, analista senior de energía de la consultora BTU Analytics. “En su mayor parte, el público está pidiendo energías renovables”.
El carbón fue destronado por el gas natural como el rey de la industria de la energía eléctrica en 2016. Ese movimiento fue causado en gran parte por el auge de las lutitas, que dejó a los Estados Unidos con una gran cantidad de gas natural barato para quemar por energía. En abril, la capacidad de generación de carbón instalada total disponible era de 257.48 gigavatios, según el informe de la FERC. No en vano, el cambio fue impulsado por el aumento de la energía solar y eólica.
Si bien no se agregaron nuevas centrales eléctricas de carbón este año, el informe de la FERC mostró que las unidades solares aumentaron en 102 unidades, o 1,473 megavatios. El viento también creció en 18 unidades o 1,545 megavatios. El informe de la FERC mide la capacidad, no la cantidad real de energía generada, la energía renovable suele tener una menor capacidad de utilización que otras fuentes de combustible. En otras palabras, solo porque la energía renovable tiene el potencial de generar tanta electricidad, no significa que realmente lo hará, al menos no todavía.
No se espera que la generación renovable supere al carbón en forma anual durante varios años. Hoza señaló que los hallazgos del informe FERC aún no se han comparado con los números más observados publicados por la EIA, pero espera que eso cambie pronto.
“Eventualmente veremos que las energías renovables superan al carbón en todo el país”, dijo Hoza.
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Dadas estas tendencias, McDermott, el socio de capital de Greentech, calificó los esfuerzos de la administración de Trump para ahorrar carbón como un “concepto ridículo” similar a tratar de salvar el teléfono rotatorio.
“El público no lo quiere y el mundo no puede soportarlo”, dijo McDermott. “La administración de Trump está jugando a favoritos políticos, tratando de apuntalar una industria que está tecnológicamente obsoleta”.
Las compañías de energía están cediendo cada vez más a la presión de los clientes y los estados para adoptar una energía más limpia. Con Edison (ED), una de las mayores empresas de servicios públicos propiedad de inversionistas, adquirió proyectos de energía solar y eólica por un valor de $2.1 mil millones el año pasado. La compañía es ahora el segundo mayor productor de energía solar en América del Norte.
Xcel Energy (XEL), con sede en Minneapolis, ha pasado de ser una empresa de energía eléctrica líder en carbón a una con el objetivo de entregar electricidad con cero emisiones de carbono para 2050. Las energías renovables incluso están empezando a ejercer presión sobre el gas natural, que es un combustible fósil de combustión más limpia.
De acuerdo con un informe publicado por la empresa de análisis de energía Drillinginfo, la generación de energía eólica y solar programada para estar en línea podría desplazar hasta 1.42 mil millones de pies cúbicos por día de la demanda de gas para energía eléctrica.
“Las renovables se van a poner cada vez más baratas y más baratas. No hemos terminado”, dijo McDermott.
Este texto apareció originalmente en CNN, puedes ver el original en inglés aquí.
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