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Keurig ha acordado pagar 1.5 millones de dólares en multas después de que la Comisión de Bolsa y Valores acusara a la empresa de hacer declaraciones engañosas sobre el grado de reciclaje de sus populares cápsulas de café de un solo uso K-Cup.
Las dudas sobre si las cápsulas de café de un solo uso, fabricadas con plástico difícil de reciclar, son respetuosas con el medio ambiente han rondado a la empresa durante años. Un artículo revisado por pares de 2021 concluyó que las cápsulas de café generan más emisiones que otras formas de preparar café, debido a los gases de efecto invernadero que se generan al producir el envase y los residuos posteriores.
Para ciertos consumidores, las preocupaciones medioambientales fueron un factor importante a la hora de decidir si comprar o no un sistema Keurig, afirmó la SEC en sus conclusiones. En 2019, la venta de K-Cups, así como del sistema de preparación de café Keurig, representaron una parte importante de las ventas de la empresa.
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El sitio web de Keurig dice (con un asterisco) que desde finales de 2020 el 100% de las cápsulas K-Cup son reciclables. La SEC ha descubierto que eso es engañoso.
Keurig dijo a los inversores durante los años fiscales 2019 y 2020 que las pruebas de la empresa con las instalaciones de reciclaje “validaron que [las cápsulas K-Cup] se pueden reciclar de manera efectiva”, dijo la SEC. Esa afirmación omitió una advertencia importante: dos de las empresas de reciclaje más grandes de EE.UU., que operan más de un tercio de las instalaciones de reciclaje en el país, expresaron “comentarios negativos significativos” sobre la reciclabilidad del producto y expresaron que no tenían la intención de aceptar cápsulas para reciclar.
Un portavoz de Keurig Dr Pepper dijo en una declaración a NPR: “Estamos encantados de haber llegado a un acuerdo que resuelve completamente este asunto”. La empresa acordó pagar las multas sin admitir ni negar los hallazgos de la SEC.
La declaración continuó: “Nuestras cápsulas K-Cup están hechas de plástico de polipropileno reciclable (también conocido como plástico n.º 5), que es ampliamente aceptado en los sistemas de reciclaje en la acera en América del Norte. Seguimos alentando a los consumidores a que consulten con su programa de reciclaje local para verificar la aceptación de las cápsulas, ya que no se reciclan en muchas comunidades. Seguimos comprometidos con un sistema de reciclaje mejor y más estandarizado para todos los materiales de embalaje a través de acciones de KDP, colaboración y soluciones políticas inteligentes”.
Afirmar que un producto es reciclable significa que se puede recolectar, separarse o recuperarse del flujo de desechos para su reutilización o en la fabricación de otros productos. Pero definir exactamente lo que eso significa es difícil por varias razones:
Diferentes estados de EE.UU. Tienen diferentes regulaciones y directrices de reciclaje, lo que puede afectar lo que se considera reciclable en un lugar determinado.
Impacto: Los océanos se inundan de plástico (incluso biodegradables)
La disponibilidad y la calidad de la infraestructura de reciclaje también varían de un lugar a otro. Incluso si un producto técnicamente es reciclable, una instalación de reciclaje local puede no poder aceptarlo porque su equipo no puede procesarlo.
Si no existe una demanda del mercado para el material reciclado, es poco probable que las compañías de reciclaje lo acepten.
Al final, los fabricantes de cápsulas de café también tienen un papel que desempeñar en las emisiones. Keurig usa plástico para producir sus cápsulas. Además de ser difíciles de reciclar, el plástico se deriva de los combustibles fósiles.
Nespresso, propiedad de Nestlé, fabrica vainas de café principalmente de aluminio, dice Anna Marciano, jefa de sostenibilidad y asesor general de Nespresso USA. Ella dice que la compañía trabaja con municipios como la ciudad de Nueva York en su infraestructura de reciclaje para las cápsulas de aluminio y también está probando un programa para cápsulas de café compostables en Europa.
Nespresso gasta más de $35 millones anuales en un programa de reciclaje de cápsulas de café, según Marciano. “No es algo en lo que no estamos invirtiendo”, dice ella. ¿Y cuánto se recicla realmente en los Estados Unidos? “Podríamos tener entre 36% y 37% a nivel nacional”, dice Marciano.
Este texto apareció originalmente en NPR y The Conversation.
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