Cómo está cambiando la legislación climática bajo Trump
- comments
- Publicado en DestacadasNos PreocupaNoticias
- 0
- Traducido por Mónica Morales - Fuente The New York Times - Foto por Global Politics and Law
Desde que asumió el cargo en enero, el presidente estadounidense Donald Trump ha hecho de la eliminación de las regulaciones federales una prioridad. Su administración, con la ayuda de los republicanos en el Congreso, a menudo ha elegido como blanco a las normas ambientales que considera como una carga para la industria de los combustibles fósiles; incluyendo las principales políticas del ex presidente Barack Obama dirigidas a combatir el cambio climático.
Hasta la fecha, la administración de Trump ha tratado de revertir más de 50 normas ambientales, según un análisis realizado por The New York Times.
Hay tres tipos de cambios en la política: reglas que se han revertido oficialmente; anuncios y cambios aún en curso, pendientes de revisiones y otros procedimientos de reglamentación; y las regulaciones cuyo estado no está claro debido a demoras o acciones judiciales. (Varias reglas fueron deshechas, pero luego se reestablecieron después de algunos desafíos legales).
A menudo, las regulaciones se han revertido como una respuesta directa a las peticiones de las compañías de petróleo, carbón y gas y otros grupos de la industria; que han tenido una relación mucho más estrecha con las figuras clave en la administración de Trump, que con el ex presidente Barack Obama.
Scott Pruitt, director de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), se ha reunido casi todos los días con ejecutivos de la industria y cabilderos. (Como fiscal general de Oklahoma, Pruitt demandó a la agencia que ahora supervisa más de una docena de veces para tratar de bloquear las reglas de la era de Obama). La EPA ha estado involucrada en casi un tercio de las reversiones de políticas identificadas por The New York Times.
Encontrarás, en detalle, cada política manipulada por la administración hasta ahora, incluyendo quién presionó para que se modifiquen las regulaciones.
REVOCADAS
- Se revocaron los estándares de inundación de la era de Obama para proyectos de infraestructura federales.
Revocada por el presidente Trump en agosto, esta norma requería que las agencias federales protegieran nuevos proyectos de infraestructura mediante la construcción de estándares de inundaciones más altos. Grupos comerciales de construcción y muchos legisladores republicanos se opusieron a ello como costoso y molesto.
- Se rechazó una propuesta de prohibición de un insecticida potencialmente dañino.
Dow Agrosciences, que vende el insecticida chlorpyrifos, se opuso a un análisis de riesgo por la EPA (Obama era) que descubrió que el compuesto suponía un riesgo para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso de un feto. Pruitt rechazó el análisis argumentando que el químico necesitaba más estudios.
- Se descongelaron nuevos arrendamientos de carbón en tierras públicas.
Las compañías carboneras no estaban entusiasmadas con la congelación de tres años por parte de la administración de Obama, ya que estaban en espera de una revisión ambiental. Ryan Zinke, secretario del Interior, revocó la congelación y revisión en marzo. En septiembre, nombró a los miembros de un nuevo comité asesor sobre las regalías del carbón.
- Se canceló el requisito de que las compañías de petróleo y gas reporten sus emisiones de metano.
En marzo, funcionarios republicanos de 11 estados escribieron una carta a Scott Pruitt, diciendo que la regla agregó costos y papeleo para las compañías. Al día siguiente, Pruitt revocó la regla.
- Revocó una regla que impedía que las compañías de carbón vertieran desechos mineros en corrientes locales.
En febrero, el Congreso aprobó un proyecto de ley que revoca la norma, Trump la convirtió en ley.
- Aprobó el oleoducto Keystone XL.
Los republicanos, junto con los grupos de la industria del petróleo, el gas y el acero argumentaron que el proyecto crearía empleos y apoyaría la independencia energética de América del Norte. Después de que la compañía del oleoducto volvió a solicitar un permiso, la administración de Trump lo aprobó.
- Aprobó el oleoducto Dakota Access.
Los republicanos criticaron a Obama por demorar la construcción después de las protestas lideradas por la tribu Standing Rock Siux. Trump ordenó una revisión acelerada del oleoducto, el ejército lo aprobó. El petróleo crudo comenzó a fluir el 1 de junio, pero luego un juez federal ordenó una nueva revisión ambiental.
- Prohibió el financiamiento de proyectos de terceros mediante acuerdos judiciales federales, que podrían incluir programas ambientales.
Para la solución de demandas con el gobierno federal, las empresas a veces han pagado por proyectos de terceros. El Departamento de Justicia ahora ha prohibido tales pagos.
- Derogó una prohibición de perforación de petróleo y gas, costa afuera, en los océanos Atlántico y Ártico.
Trump revocó la política en una orden ejecutiva, en abril, solicitándole a Ryan Zinke que revisara las ubicaciones disponibles para la perforación en el mar.
- Se propuso el uso de pistolas de aire sísmicas (pistola hidráulica) para la exploración de gas y petróleo en el Atlántico.
A consecuencia de una orden ejecutiva conocida como la Estrategia de Energía Extraterritorial en Estados Unidos, la administración de Trump comenzó un proceso de solicitud para permitir que cinco compañías de petróleo y gas inspeccionaran el Atlántico utilizando armas de aire sísmicas, cuyos estallidos pueden dañar ballenas, peces y tortugas.
- Revocó una orden de 2016 que protege la región del norte del mar de Bering en Alaska.
Trump revocó la orden de proteger dicha área mediante la conservación de la biodiversidad, la participación de las tribus nativas y la construcción de una economía sostenible.
- Derogó una regla de la era de Obama que regula las regalías para el petróleo, el gas y el carbón.
Los grupos de presión para la industria de combustibles fósiles se opusieron a las regulaciones que garantizaban que regalías justas eran pagadas al gobierno por petróleo, gas y carbón extraídos de tierras federales o tribales. En agosto, la administración de Trump rescindió la regla, diciendo que causó “confusión e incertidumbre” para las compañías de energía.
- Retiró la guía para que las agencias federales incluyan las emisiones de gases de efecto invernadero en las revisiones ambientales.
Los republicanos en el Congreso argumentaron que el gobierno carecía de la autoridad para hacer tales recomendaciones, y que las nuevas reglas retrasarían los permisos.
- Distendió el proceso de revisión ambiental para proyectos de infraestructura federales.
En una orden ejecutiva, Trump anunció una política que dijo que simplificaría el proceso de los proyectos. Colocó a una sola agencia federal a cargo de la inspección de las revisiones ambientales, con un cronograma de 90 días para las decisiones de autorización de permisos y estableció el objetivo de completar el proceso completo en dos años.
- Anunció la intención de detener los pagos al Fondo Verde para el Clima.
Trump dijo que cancelaría los pagos a un programa de las Naciones Unidas que ayuda a los países en desarrollo a reducir las emisiones y adaptarse al cambio climático.
- Retiraron las restricciones propuestas a la minería en Bristol Bay, Alaska
Una compañía canadiense demandó a la EPA sobre un plan de la era de Obama para restringir la minería en Bristol Bay, una importante pesquería de salmón. La administración de Trump resolvió la demanda y permitió a la compañía solicitar permisos para construir una gran mina de oro y cobre.
- Se eliminó el oso grizzly de Yellowstone de la lista de especies en peligro de extinción.
Al notar que la población había “aumentó de 136 osos en 1975 a un estimado de 700 hoy en día”, el Departamento del Interior retiró al oso de la lista.
- Revocó la prohibición de cazar depredadores en refugios de vida silvestre de Alaska.
Políticos de Alaska se opusieron a la ley, argumentando que el estado tiene autoridad sobre esas tierras. El Congreso aprobó un proyecto de ley que revoca la norma, que Trump convirtió en ley.
- Retiró los límites propuestos para los mamíferos marinos en peligro de extinción capturados por redes de pesca en la costa oeste.
Bajo Trump, el Servicio Nacional de Pesca Marina retiró la regla propuesta, señalando altos costos y que ya existían suficientes protecciones.
- Detuvo el desaliento de la venta de botellas de agua de plástico en los parques nacionales.
La Asociación Internacional de Agua Embotellada calificó la acción como injustificada.
- Rescindió una orden de la era de Obama para considerar el cambio climático en la gestión de los recursos naturales en los parques nacionales.
El Servicio de Parques Nacionales dijo que rescindieron la política para eliminar la confusión entre los empleados públicos y del Servicio de Parques Nacionales con respecto a la “nueva visión” de la administración de Trump para los parques del país.
- Revocó directiva para agencias federales para mitigar los impactos ambientales de los proyectos que aprueban.
Trump revocó un memorando de la era de Obama que instruyó a cinco agencias federales para “evitar y luego minimizar” los impactos del desarrollo sobre el agua, la vida silvestre, la tierra y otros recursos naturales.
- Mandó a las agencias a dejar de usar un cálculo de la era de Obama del “costo social del carbono”.
Trump ordenó a las agencias que dejaran de usar un cálculo que ayudó a los legisladores a monetizar los costos de las emisiones de carbono y, en su lugar, basar sus estimaciones en un análisis costo-beneficio de 2003.
- Revocó una actualización del proceso de planificación del uso público de tierras de la Oficina de Administración de Tierras.
Los republicanos y los grupos de la industria de combustibles fósiles se opusieron a la regla, argumentando que le daba al gobierno federal demasiado poder a expensas de los intereses locales y comerciales.
- Se retiró la torta filtrante de cobre, un subproducto de fabricación de componentes electrónicos, de la lista de “residuos peligrosos”.
Samsung solicitó a la EPA que eliminará el producto de la lista, ya que éste se produce durante la galvanoplastia en su instalación de semiconductores de Texas. La EPA concedió la petición después de un período de comentarios públicos.
EN PROGRESO
- Propuesta de derogación y reemplazo del Plan de Energía Limpia.
Las compañías carboneras y los funcionarios republicanos en muchos estados se opusieron al plan. Trump emitió una orden ejecutiva en marzo instruyendo a la EPA para reevaluar el plan, que está vinculado a los tribunales y aún no ha entrado en vigor. En octubre, la EPA propuso derogar el plan y abrió un período de comentarios públicos solicitando reemplazos.
- Anunció la intención de retirar a Estados Unidos del Acuerdo Climático de París.
La administración de Trump notificó formalmente a las Naciones Unidas su intención de retirarse, pero no puede completar el proceso hasta finales de 2020.
- Se propuso rescindir una norma que protege a los afluentes y humedales en virtud de la Ley de Aguas Limpias.
Bajo la dirección de Trump, Pruitt lanzó una propuesta en junio para revertir la definición ampliada, ya que agricultores y desarrolladores inmobiliarios se opusieron.
- Reabrió una revisión de los estándares de eficiencia de combustible para autos y camiones.
Bajo Trump, la EPA y el Departamento de Transporte reabrieron una revisión de estándares para los modelos de 2021 a 2025. La administración también está considerando flexibilizar penalidades para los fabricantes de automóviles que no cumplen con los estándares federales.
- Recomendó reducir o modificar 10 monumentos nacionales.
Obama usó la Ley de Antigüedades para proteger más de 4 millones de acres de tierra y varios millones de millas cuadradas de océano. Trump ordenó una revisión de monumentos recientes, Zinke recomendó cambios para 10 lugares.
- Revisión de 12 áreas marinas protegidas.
Trump solicitó una revisión de los santuarios y monumentos marinos nacionales designados o expandidos en la última década. En junio, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) anunció que se estaban revisando 12 áreas marinas protegidas.
- Revisión de los límites de descarga tóxica desde las plantas de energía a las vías fluviales públicas.
Los representantes de la industria dijeron que cumplir con las directrices, que entrarían en vigencia en 2018, sería extremadamente costoso. En septiembre, Pruitt pospuso la norma hasta 2020.
- Revisión de las normas que regulan los residuos de ceniza de carbón de las centrales eléctricas.
Los grupos de la industria de servicios públicos solicitaron cambiar la regla, la EPA acordó reconsiderarla.
- Revisión de estándares de emisiones para plantas de energía nuevas, modificadas y reconstruidas.
Además del Plan de Energía Limpia, la Orden Ejecutiva de Trump sobre la Promoción de la Independencia Energética solicitó a la EPA revisar una regla relacionada que limita las emisiones de dióxido de carbono de estas plantas.
- Revisión de las reglas de emisiones para centrales eléctricas emergentes, en cierre y en mal funcionamiento.
Bajo Trump, la EPA le pidió al tribunal que suspendiera el caso, que pedía a 36 estados que endurecieran las exenciones de emisiones para plantas de energía y otras instalaciones, mientras la regla se somete a revisión.
- Anunció planes para revisar las mejores protecciones del hábitat del urogallo o gallo de salvia.
Los líderes de la industria del petróleo y el gas llamaron al plan para proteger el ave “profundamente defectuoso”. El Departamento del Interior, reevaluará las restricciones en la producción de energía.
- Anunció planes para rescindir las regulaciones de contaminación del agua por el fracking en tierras indias y federales.
En julio, la oficina anunció planes para revocar la regla, citando la “priorización de la producción nacional de energía” de Trump.
- Ordenó la revisión de las regulaciones de perforación de petróleo y gas en parques nacionales donde los derechos mineros son de propiedad privada.
La orden ejecutiva de Trump solicitó una revisión de las actualizaciones de la era de Obama a una regla de 50 años que regula la perforación de petróleo y gas en parques nacionales con propiedad compartida.
- Revisión de nuevas normas de seguridad en perforación en alta mar.
El Instituto Americano del Petróleo y otros grupos comerciales escribieron a la administración de Trump, lo que generó preocupaciones sobre las regulaciones de seguridad de la plataforma petrolera implementadas después de la explosión y derrame de petróleo de Deepwater Horizon (2010). En agosto, la Oficina de Seguridad y Cumplimiento Ambiental confirmó que estaba avanzando con la revisión.
- Se solicitó una revisión de una regla que regula la exploración de petróleo y gas, costa afuera, por buques flotantes en el Ártico.
Trump pidió una revisión inmediata de una regla, en respuesta al accidente de Kulluk en el Golfo de Alaska en 2013, destinada a fortalecer las normas de seguridad y ambientales para la perforación exploratoria en el Ártico.
- Propuesta de finalización de una restricción sobre la perforación exploratoria en el Refugio Nacional de Vida Silvestre del Ártico.
Los republicanos han tratado desde hace tiempo de abrir el refugio de Alaska al gas y petróleo. En agosto, un memorando interno del Departamento del Interior propuso levantar las restricciones a los estudios sísmicos exploratorios en la región.
- Se solicitó una revisión de las regulaciones federales sobre métodos de caza en Alaska.
Alaska demandó al Departamento del Interior, alegando que las regulaciones afectaban la cosecha tradicional. La administración de Trump ordenó una revisión.
- Propuesta de derogación de un requisito para reportar emisiones en carreteras federales.
La norma entró en vigor en septiembre después de que los intentos de la administración Trump de posponerla se impugnaran en la corte. Pero la administración propuso formalmente revertir la regla en días próximos.
- Anunció una revisión de los estándares de emisiones para remolques y planeadores.
Las partes interesadas en la industria del transporte se opusieron a la regla, argumentaron que la EPA carecía de la autoridad para regularlos, porque sus productos no están motorizados.
EN ESPERA
- Revisión de una regla que limita las emisiones de metano en nuevos sitios de perforación de petróleo y gas.
Una corte federal de apelaciones dictaminó que la EPA debe hacer cumplir la regulación de la era de Obama mientras reescribe la regla. La EPA dijo que puede hacerlo de forma “caso por caso”.
- Puso en suspenso las normas destinadas a reducir las emisiones de metano de los vertederos.
En mayo, la EPA suspendió la aplicación de los nuevos estándares por 90 días, en espera de una revisión. Los grupos ambientalistas impugnaron la acción en el tribunal, pero el período de demora pasó desde entonces, poniendo en entredicho el estado del caso.
- Propuso un retraso de la regla que limita las emisiones de metano en tierras públicas.
La Cámara votó este año para revocar la regla, pero el Senado rechazó la medida, 51 a 49. La Oficina de Administración de Tierras más tarde suspendió la ejecución de partes de la regla. En octubre, un tribunal federal dictaminó que la demora era ilegal y ordenó la ejecución inmediata. Al día siguiente, la Oficina de Administración de Tierras propuso una nueva demora, esta vez solicitando comentarios públicos.
- Retrasó una demanda por una regla que regula las emisiones de mercurio en el aire de las centrales eléctricas.
Compañías de carbón argumentaron que la regla ayudó a cerrar plantas de carbón, muchas de las cuales ya eran compatibles. Los argumentos orales en el caso se han retrasado mientras que la EPA revisa la regla.
- Retrasó una regla con el objetivo de mejorar la seguridad en instalaciones que usan químicos peligrosos.
Grupos de la industria química dijeron que la regla, una respuesta a la explosión de 2013 en una planta de fertilizantes que mató a 15 personas, no aumentó la seguridad. Pruitt demoró los estándares hasta 2019, en espera de una revisión. Ahora, once estados ahora están demandando por la demora.
- Seguir con la revisión de las protecciones de aguas subterráneas propuestas para ciertas minas de uranio.
Los republicanos en el Congreso dijeron que la EPA no había llevado a cabo un análisis de costo-beneficio adecuado de la regla. El gobierno de Obama presentó una propuesta revisada un día antes de que Trump asumiera el cargo, ahora su gobierno debe decidir el destino de la regla.
- Retrasó fechas de cumplimiento para los estándares federales de eficiencia de edificios.
La administración Trump retrasó el cumplimiento hasta el 30 de septiembre, pero no está claro si las reglas están ahora en vigencia.
- Retiró una regla que ayudaría a los consumidores a comprar neumáticos más eficientes en el consumo de combustible.
La industria del neumático se opuso a varios aspectos de la regla, pero había estado trabajando con el gobierno para refinarla. La administración Trump retiró la regla propuesta en enero, pero no ha dicho si puede ser reintegrada.
Fuentes: Rastreador de Reversiones en la Reglamentación Ambiental de la Escuela de Leyes de la Universidad de Harvard; Rastreador de Desregulaciones del Clima de la Escuela de Leyes de la Universidad de Columbia; Registro Federal; Agencia de Protección Ambiental; Casa Blanca.
Nota: Esta lista no incluye nuevas reglas propuestas por la administración de Trump, que no restrinjan las políticas anteriores, ni incluye acciones judiciales que hayan afectado las políticas ambientales independientemente de la acción ejecutiva o legislativa.
Este texto apareció originalmente en The New York Times, puedes encontrar el original en inglés aquí.