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Nuevo informe de las Naciones Unidas advierte que la brecha entre los objetivos del Acuerdo de París y lo que los países se han comprometido a hacer para lograrlos se está ampliando. Esto representa un desafío importante para los líderes políticos y las negociaciones internacionales sobre el clima.
Sin una rápida reestructuración de la economía global y los sistemas de energía, incluida la finalización del uso del carbón y el aumento de la energía renovable, el mundo está en camino de superar los objetivos de temperatura del Acuerdo de París.
Las emisiones globales de gases de efecto invernadero aumentaron alrededor del 1% el año pasado, pero el mayor cambio se debe a la disminución de las esperanzas de una rápida expansión de la tecnología para capturar carbono del aire y almacenarlo bajo tierra.
Estudios anteriores de la ONU habían asumido que las tecnologías de captura de carbono se desplegarían ampliamente a fines de siglo, lo que permitiría un mayor margen de maniobra para las emisiones globales.
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Pero el último Informe de la Brecha de Emisiones, revisó a la baja el presupuesto mundial de carbono, el total de emisiones permitidas para mantenerse dentro de los objetivos del acuerdo climático.
“La ciencia es clara”, dijo en un comunicado la directora ejecutiva interina del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Joyce Msuya. “A pesar de todas las ambiciosas acciones climáticas que hemos visto, los gobiernos deben avanzar más rápido y con mayor urgencia”.
A pesar del gran éxito logrado en los últimos años para controlar las emisiones, las naciones deben triplicar efectivamente sus objetivos de reducción de la contaminación si el mundo espera mantener el calentamiento por debajo de los 2°C, según el informe.
Para mantener el calentamiento global a 1.5°C, los países tendrán que aumentar su ambición por un factor de cinco.
El informe anual proporciona la contabilidad definitiva de los compromisos nacionales para reducir las emisiones como parte del Acuerdo de París y los compara con la última ciencia del clima.
Las emisiones globales probablemente tendrán que alcanzar un máximo en 2020 y caer un 25% por debajo de los niveles actuales en 2030 para limitar el calentamiento a menos de 2°C. Mantener el calentamiento a 1.5°C requerirá un recorte del 55%.
Sin embargo, según las políticas actuales, las emisiones seguirán aumentando hasta 2030. E incluso si todas las naciones cumplen sus promesas de París, se proyecta que las emisiones serán aproximadamente iguales en 2030 como lo son actualmente.
El informe llega al final de un año en el que se registró una ola de calor récord en gran parte del mundo, los devastadores huracanes azotaron América del Norte y Asia y el incendio forestal más letal y destructivo de la historia de California.
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También viene de la mano de un informe anterior de la ONU y uno publicado por el gobierno de los Estados Unidos que subraya los riesgos de no limitar las emisiones de gases de efecto invernadero para frenar el cambio climático.
“La urgencia de este mensaje es cada vez más fuerte para el público cotidiano, y los impactos climáticos definitivamente están superando nuestra respuesta”, dijo Kelly Levin, autora principal del informe y asociada principal del Instituto de Recursos Mundiales (WRI). “Esta brecha en la acción está contribuyendo a muchos de los impactos que estamos viendo en todo el mundo”.
Según el informe, muchas de las principales economías del mundo, incluidos los Estados Unidos y la Unión Europea, no están cumpliendo con las promesas que hicieron bajo el Acuerdo de París. Al igual que, la ventana para alcanzar el objetivo de 1.5°C, se está cerrando rápidamente, y que no hacerlo daría lugar a impactos perjudiciales en muchas regiones del mundo.
Este texto apareció originalmente en InsideClimate News, puedes encontrar el original en inglés aquí.
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