Suscríbete
Las consecuencias del cambio climático pueden tener efectos en nuestra salud, desde asma o depresión hasta problemas de nacimiento y deficiencias psíquicas, según alerta un nuevo informe de la Alianza Mundial de Salud de Australia (GLHAM).
“Los eventos climáticos extremos, como las inundaciones, pueden limitar el desarrollo cognitivo de los bebés y niños pequeños”, declara el informe. “Los niños que experimentan eventos climáticos extremos antes de nacer tienen un vocabulario más reducido y un tipo de juego menos imaginativo cuando tienen dos años”.
Te puede interesar: Reporte: la crisis climática está seriamente afectando nuestra salud
Las madres de los niños examinados en el estudio experimentaron eventos climáticos extremos durante su embarazo, tales como la tormenta de hielo canadiense o las inundaciones de Brisbane de 2011.
“Cuando entendemos que el cambio climático es un problema de salud, y que la salud ya está siendo afectada aquí en Australia y en toda la región, está claro que existe una necesidad urgente de acción”, dijo el profesor John Thwaites, ex ministro de Salud de Victoria y presidente del Instituto de Desarrollo Sostenible Monash y de ClimateWorks Australia.
Los autores afirman que la zona estudiada, Australia y los países vecinos, están experimentando un número creciente de fallecimientos, enfermedades y lesiones por olas de calor, ciclones y otros fenómenos meteorológicos extremos debido al cambio climático.
El aumento de las temperaturas originará brotes de enfermedades nuevas y exacerbará las pandemias ya existentes como el virus del zika y demás enfermedades transmitidas por los mosquitos. Además, la mala calidad del aire y del agua empeorará enfermedades como el asma, la neumonía, las alergias y las diarreas.
Asimismo, el informe también hace hincapié en aquellas enfermedades mentales como la depresión que se pueden ver muy influidas por la falta de recursos y el riesgo de sufrir desastres naturales que mermarán además los cultivos.
Puedes leer: Cambio climático y salud infantil
“Reducir y adaptarse a los impactos del cambio climático en la salud es un imperativo claro, que además ofrece un beneficio económico. En particular, las acciones preventivas y tempranas pueden generar importantes ahorros públicos y privados con el tiempo”, afirma el profesor John Thwaites en el estudio. “Una respuesta gubernamental efectiva requerirá intervenciones de una serie de sectores, incluyendo agricultura, transporte, vivienda, agua y saneamiento”, agregó.
Este texto apareció originalmente en National Geographic, puedes ver el original aquí.
Suscríbete a nuestro boletín
Lo más importante en tu buzón cada semana