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El físico teórico Stephen Hawking ha fijado un plazo para que la humanidad se salve. En los próximos 100 años, advierte, necesitamos colonizar Marte y otros planetas. Si no lo hacemos, es posible que no sobrevivamos al cambio climático, las enfermedades y otras versiones de la muerte que nos estamos imponiendo a nosotros mismos en este siglo.
Esta visión pesimista sobre la humanidad no es nueva, pero ahora él lo menciona más porque está por estrenarse su nuevo documental de la BBC, Expedition New Earth.
“A diferencia de Donald Trump, que pudo haber tomado la decisión más seria y equivocada sobre el clima que este mundo ha visto, estoy defendiendo el futuro de la humanidad y una estrategia a largo plazo para lograr esto“, dijo Hawking, con 75 años y todavía profesor en la Universidad de Cambridge.
“Hemos dado a nuestro planeta el desastroso regalo del cambio climático… Cuando hemos llegado a crisis similares, generalmente ha habido otro lugar para colonizar… Pero no hay un mundo nuevo, ninguna utopía a la vuelta de la esquina. Nos estamos quedando sin espacio y los únicos lugares que nos quedan son otros mundos”, comentó.
Hawking tiene algunas metas concretas para la construcción de nuevas civilizaciones antes de que desaparezcamos, él dice lo siguiente: reducir drásticamente el costo del vuelo espacial y desarrollar nuevas tecnologías para llegar más lejos y más rápidamente al espacio. También descubrir nuevos planetas, que sean más habitables e investigar cómo sobrevivir en planetas inhóspitos que ya se conocen, como Marte, y planetas que podrían proteger la vida, como Proxima B.
Estas ideas pueden sonar familiares porque los multimillonarios como Elon Musk y Richard Branson están profundamente interesados en vuelos espaciales y en estos planteamientos. Algunos de los compañeros físicos y astrónomos de Hawking también coinciden en que podríamos usar una estrategia de salida; y ahora hay una pequeña comunidad de aspirantes preparándose para vivir en Marte.
El año pasado, según Brian Resnick de la revista Vox, Hawking, junto con un multimillonario ruso y Mark Zuckerberg, inventaron un esquema para construir y enviar naves espaciales del tamaño de sellos postales a Alpha Centauri, la segunda estrella más cercana a la Tierra.
El plan, llamado Breakthrough Starshot, es ambicioso. Un gran número de obstáculos de la ingeniería tendría que ser despejado en el próximo par de décadas para hacer posible un lanzamiento; esto es sólo un pequeño ejemplo de lo que se necesitaría para ir a otros planetas y la luna.
Esto también se podría calificar como un llamado totalmente despreocupado, como un estímulo para renunciar a resolver los problemas que nosotros mismos hemos creado.
Las fechas que Hawking menciona son particularmente preocupantes para los científicos del clima y otros dedicados a la protección del planeta Tierra en este momento. Si se busca nuestra salvación fuera de nuestro sistema solar, ya no se enfocarían en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para evitar el cambio climático. También se desviarían los fondos precisos para esos esfuerzos.
Stephen Hawking admite que hay riesgos para el tipo de exploración espacial que él está razonando. No se sabe qué hay en esos planetas o quiénes ya lo habitan. El universo es tan vasto, pero nuestro planeta Tierra es único.
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